Un buen líder
2018-03-01
1. Oración inicial
Amado Dios, te ruego me ayudes a ser irreprensible, sobrio, prudente, decoroso, honesto, quiero caminar en santidad, andar en tu presencia y que tu carácter se refleje en mi vida. Te alabo y glorifico tu Santo nombre, amén.
2. Lee la palabra de Dios
“Palabra fiel: Si alguno anhela obispado, buena obra desea. Pero es necesario que el obispo sea irreprensible, marido de una sola mujer, sobrio, prudente, decoroso, hospedador, apto para enseñar; no dado al vino, no pendenciero, no codicioso de ganancias deshonestas, sino amable, apacible, no avaro; que gobierne bien su casa, que tenga a sus hijos en sujeción con toda honestidad (pues el que no sabe gobernar su propia casa, ¿cómo cuidará de la iglesia de Dios?); no un neófito, no sea que envaneciéndose caiga en la condenación del diablo. También es necesario que tenga buen testimonio de los de afuera, para que no caiga en descrédito y en lazo del diablo” 1 Timoteo 3:1-7
3. Reflexiona
Cuando la Biblia habla de obispos, esta palabra de extracción griega, epískopos, significa supervisor, líder, persona con responsabilidades especiales en las iglesias, ocupación que de sí ya es excelente, también se daba como título a quienes lideraban en profesiones seculares, profesionales y de tanta importancia como la de los esposos, que como padres de familia vienen a ejercer como pastores de sus esposas y de sus hijos. A unos y a otros es que el Espíritu Santo por Pablo, exhorta a perseverar en su llamado y ganar el buen testimonio de los demás. Pablo pide que los líderes, en todos los órdenes, tengan una buena reputación entre los de afuera, es decir admirados por el mundo inconverso. Tal reconocimiento viene como resultado de una responsabilidad digna y llena de honestidad. Tal líder se reconoce por la fidelidad en su relación matrimonial. Su esposa y sus hijos dan testimonio de un hombre íntegro y transparente. Cumple lo que dice, practica lo que predica, y es firme en su carácter.
Estos principios son aplicables no solo cuando somos vistos, sino en la vida privada. Lo que hace una persona cuando está sola, y nadie la observa, es lo que mejor define su carácter. Esto fue lo que se vio en la vida de Natanael cuando estaba solo, debajo de la higuera. “Cuando Jesús vio a Natanael que se le acercaba, dijo de él: He aquí un verdadero israelita, en quien no hay engaño. Le dijo Natanael: ¿De dónde me conoces? Respondió Jesús y le dijo: Antes que Felipe te llamara, cuando estabas debajo de la higuera, te vi”. (Juan 1:47-48). En la soledad ¿qué pienso?, ¿qué deseo?, ¿qué busco?, ¿qué hago?, ¿con qué me distraigo? ¿estoy persuadido de que los ojos del Señor están sobre mí?
El líder se forja en la perseverancia de los principios y ordenanzas del Señor y en los tiempos solitarios de comunión íntima con Dios, de estudio de la Palabra y la oración. Es así como Dios da espíritu de poder, de amor y de dominio propio. 2 Timoteo 1: 7
4. Alaba a Dios
5. Comparte
Puedes compartir este devocional en Facebook, Whatsapp, Twitter y LinkedIn