Siempre. Parte 2
2017-10-04
1. Oración inicial
Señor, gracias por tu cuidado en cada detalle de mi vida, porque permaneces siempre fiel y me sustentas día a día con tu palabra. Amén.
2. Lee la palabra de Dios
“El que camina en integridad anda confiado;
Mas el que pervierte sus caminos será quebrantado.”
“Estad, pues, firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud.” Proverbios 10:9, Gálatas 5:1-20,
3. Reflexiona
La seguridad de mantenernos siempre fieles a Dios, no depende de nuestro esfuerzo carnal independiente, sino de aceptar lo que Dios hizo por nosotros por medio de Jesucristo en la cruz. Entre más reconozca y me identifique con Cristo, más me mantendré fiel a Él y a su Palabra. Al recibirlo en mi vida, me ha dado un Espíritu de amor, poder y dominio propio, para estar sostenido y creciendo en santidad.
En Tesalonicenses 3:3 me ha prometido que en su fidelidad me afirmará y me guardará del mal, lo cual denota el gran cuidado y favor de Dios para quienes lo hemos recibido y hemos sido sellados con su Espíritu Santo; un Padre amoroso y fiel, que no solo nos hizo nacer por la palabra de verdad sino que nos sostiene en medio de las dificultades de la vida.
En Santiago 1:8 dice que “El hombre de doble ánimo es inconstante en todos sus caminos”, lo cual se refiere al hecho de no mantenernos en la seguridad y libertad con que Cristo nos hizo libres, permitiendo que entre la duda y el temor, dando pasos atrás, volvemos engañados a ser esclavos del pecado.
Por esto, debemos estar firmes, constantes en la oración, el estudio bíblico y la comunión con los hermanos, recordando todo lo que el Señor ha hecho por nosotros y lo que ahora somos en Cristo; puesto que nos ha asegurado “No te desampararé, ni te dejaré;” permanezcamos siempre en esta verdad.
4. Alaba a Dios
5. Comparte
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