Señor tú eres la luz del mundo
2018-03-05
1. Oración inicial
Señor Jesucristo, un día decidí abrir mi corazón para que tú mores en mí y desde aquel día las tinieblas y la oscuridad de mi vida retrocedieron, pues tú eres mi luz y mi Salvación. Me has llamado de las tinieblas a tu luz admirable. Gracias Señor, amén.
2. Lee la palabra de Dios
“Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida.”, Juan 8:12
3. Reflexiona
Era la época de la fiesta de los tabernáculos entre los judíos, y como estatuto perpetuo, Dios les había ordenado que alumbraran el tabernáculo de reuniones, que hicieran arder las lámparas sostenidas en unos grandes candelabros, lo cual para los judíos era un ritual, pero a Jesús lo motivó a decir: “Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida”
La mayoría de los judíos no entendieron las palabras de Jesús. Dios ilumino a su pueblo en el desierto durante la noche con una columna de fuego, y de igual forma hoy en día Jesucristo ilumina el camino de aquellos que andan en la oscuridad y que aceptan a Jesucristo como su Salvador. Cristo es la luz para todos los hombres.
Hoy el mundo está bajo la potestad del príncipe de las tinieblas, y muchos caminan en medio de ese mundo de oscuridad, y necesitan urgente la luz de Cristo, pues sólo ante su presencia retroceden las tinieblas. La Biblia dice: “En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres. La luz en las tinieblas resplandece, y las tinieblas no prevalecieron contra ella” Juan 1:4-5
La opción es abrir el corazón y aceptar a Jesucristo para que gobierne nuestra vida y la luz de Cristo iluminará nuestro camino, pues el que anda en la Luz no tropezará.
4. Alaba a Dios
5. Comparte
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