No te intimides
2017-01-26
1. Oración inicial
Señor, ante los grandes desafíos no permitas que nos intimidemos, cuando nos sentimos amenazados por los que se oponen a tu Palabra, y por los ataques del enemigo, que quiere a toda costa que nos rindamos. Hoy queremos tomar aliento en tu presencia, sabiendo que el mismo poder divino es el que deshace todo ataque, toda barrera que nos impide llevar tu mensaje en medio de la oscuridad que nos rodea. Hoy en tu nombre ayúdanos a tomar posesión y conquistar el lugar que nos has dado.
2. Lee la palabra de Dios
«Y Jehová va delante de ti; él estará contigo, no te dejará, ni te desamparará;no temas ni te intimides.», Deuteronomio 31:8
«Nadie te podrá hacer frente en todos los días de tu vida; como estuve con Moisés, estaré contigo; no te dejaré, ni te desampararé. Esfuérzate y sé valiente; porque tú repartirás a este pueblo por heredad la tierra de la cual juré a sus padres que la daría a ellos. Solamente esfuérzate y sé muy valiente, para cuidar de hacer conforme a toda la ley que mi siervo Moisés te mandó; no te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra, para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas. Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito; porque entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien. Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.», Josué 1: 5-9
3. Reflexiona
Intimidar, equivale en el hebreo a «khaw-thath’ , que significa quebrar, triturar, ser derribado con violencia, confusión y temor.
Dios está buscando una respuesta de parte de Josúe, ante el desafío de conquistar la tierra prometida y le da una promesa donde además de la advertencia, le da una orden » no te intimides», en otras palabras ante la presencia del enemigo «no te desquebrajes, ni te derrumbes». El error de Josué fue considerar que la orden de Dios era una sugerencia. Intimidarse es una decisión de la voluntad humana,que empieza con un ciclo que involucra, mente, emociones y acción. Ante los problemas el corazón humano tiende a prepararse y se cuestiona que necesita tiempo para enfrentarlo y resolverlo, pero para Dios no siempre es así, la lucha contra el desquebrajarse, es una orden, Dios no apela a las emociones, sino que da una directiva de sanidad, que depende de una fuerte relación con Él, «estás conmigo, confía en mi Palabra».
La mente de aquel que está acostumbrado a permanecer delante de Dios, no considera esto una sugerencia, sino un mandato «no te intimides». Entonces, esperemos poder ser valientes en Cristo para enfrentar las batallas espirituales. En él somos más que vencedores, al hacernos sus hijos, nos ha dado toda potestad, toda autoridad para vencer. Todo esto es un proceso de confianza, que debe generar certeza en su Palabra y poder para obedecer a Dios. En Josué tomó tiempo hacerlo, puesto que Dios se lo vuelve a recalcar en Josué 1:5-9 » nadie te podrá hacer frente, estaré contigo, no te dejaré ni te desampararé, esfuérzate y se valiente».
¿ Cuál es nuestra decisión? ¿Creemos en Él o seguimos confiando en los temores de nuestra alma? recordemos que donde hay temor no se ha perfeccionado el amor de Cristo. Dejemos que Dios coloque certeza para afirmar nuestra vida y no dudemos de lo que es capaz de hacer con y a través de nosotros. No olvidemos hoy tantos hermanos perseguidos por causa de su nombre y oremos por ellos.
4. Alaba a Dios
5. Comparte
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