No nos desanimemos: las aflicciones pasarán
2017-01-22
1. Oración inicial
Señor llénanos de tu fuerza, porque es muy fácil desmayar ante las dificultades y problemas a los que nos enfrentamos. Solo de ti proviene la fortaleza interior que necesitamos, para no permitir que nada nos obligue a abandonar la tarea de servirte, renueva nuestro compromiso de seguirte. Gracias por darnos tu Espíritu, que su frescura nos revitalice hoy.
2. Lee la palabra de Dios
«Así dice Jehová, Hacedor tuyo, y el que te formó desde el vientre, el cual te ayudará: No temas, siervo mío Jacob, y tú, Jesurún, a quien yo escogí. Porque yo derramaré aguas sobre el sequedal, y ríos sobre la tierra árida; mi Espíritu derramaré sobre tu generación, y mi bendición sobre tus renuevos;», Isaías 44:2-3
«Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día. Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria;», 2 Corintios 4: 16-17
3. Reflexiona
No importa lo que nos suceda en la vida tenemos la seguridad de la vida eterna, en la que todo sufrimiento terminará. El peso de todas las aflicciones temporales no es comparable con el peso de la gloria venidera. Estas palabras deben llenarnos de aliento, nuestra vida está escondida en Cristo. Estamos en el hueco de su mano. Nada debe hacernos flaquear porque tenemos la seguridad de que nuestro Amado Señor siempre nos sustentará con la diestra de su justicia. Por eso no nos desanimemos si estamos pasando por diversas pruebas y recordemos que aunque por fuera de pronto nos estamos deteriorando por dentro nos renovamos día a día.
4. Alaba a Dios
5. Comparte
Puedes compartir este devocional en Facebook, Whatsapp, Twitter y LinkedIn