No envidies al malo que progresa
2017-11-24
1. Oración inicial
Señor, gracias porque me has limpiado y no tengo por qué andar preocupado por el progreso que da el mundo, porque mi éxito fue encontrarte a ti. Amén
2. Lee la palabra de Dios
”No tenga tu corazón envidia de los pecadores,
Antes persevera en el temor de Jehová todo el tiempo;” Proverbios 23:17
“Porque tuve envidia de los arrogantes,
Viendo la prosperidad de los impíos.” Salmos 73:3
3. Reflexiona
Muchas veces nos sentimos agobiados al ver cómo las personas que no creen en Dios progresan, sobre todo aquellos que tienen éxito a partir de ganancias mal habidas.
Llegamos a pensar que es en vano nuestro actuar correcto, como dice el salmista “Verdaderamente en vano he limpiado mi corazón, y lavado mis manos en inocencia” (Salmo 73:13). Pero el éxito y progreso aparente de quien actúa mal, es igual al que construye una casa sobre la arena, que por muy hermosa que parezca, en algún momento se va a derrumbar.
Entrando en la intimidad de la oración y del estudio bíblico, tal como enseña EL Salmo 73: 17 “…Hasta que entrando en el santuario de Dios, Comprendí el fin de ellos…”, nos damos cuenta que el fin de quien actúa injustamente es el castigo; quien persiste en hacer el mal ha rechazado a Dios, al que lo puede sanar y hacer cambiar su conducta.
Nosotros, gracias a nuestra fe hemos sido limpiados y justificados, por lo tanto perseveraremos en el temor del Señor y apartaremos la envidia de nuestro corazón, por el progreso de los malos, porque este ilusorio progreso será su propia ruina, como nos lo revela el Espíritu Santo en el Salmo 73.
4. Alaba a Dios
5. Comparte
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