Mensajeros del Dios altísimo
2018-09-23
1. Oración inicial
Amado Dios, he sido llamado por ti para hacer tu voluntad y mi obediencia traerá bendición para mi familia, y para los que me rodean. He sido comisionado para llevar un mensaje de salvación y proclamar el evangelio del Reino de los Cielos por donde quiera que yo vaya. Te amo Señor, amén.
2. Lee la palabra de Dios
Vino palabra de Jehová a Jonás hijo de Amitai, diciendo: Levántate y ve a Nínive, aquella gran ciudad, y pregona contra ella; porque ha subido su maldad delante de mí. Y Jonás se levantó para huir de la presencia de Jehová a Tarsis, y descendió a Jope, y halló una nave que partía para Tarsis; […], lejos de la presencia de Jehová. Pero Jehová hizo levantar un gran viento en el mar, y hubo en el mar una tempestad […]. Pero Jonás había bajado al interior de la nave, y se había echado a dormir. Y el patrón de la nave se le acercó y le dijo: ¿Qué tienes, dormilón? Levántate, y clama a tu Dios; quizá él tendrá compasión de nosotros, y no pereceremos. […] Entonces le dijeron ellos: Decláranos ahora por qué nos ha venido este mal. […] Y él les respondió: Soy hebreo, y temo a Jehová, Dios de los cielos, que hizo el mar y la tierra. Y aquellos hombres temieron sobremanera, y le dijeron: ¿Por qué has hecho esto? Porque ellos sabían que huía de la presencia de Jehová, pues él se lo había declarado”, Jonás 1:1-11
3. Reflexiona
Dios envió a Jonás a anunciar su juicio a Nínive, ciudad pagana. Pero Jonás no estuvo de acuerdo con el mandato de Dios de predicarle a este pueblo impío, por eso huyó a Tarsis. Sin embargo, envió una tormenta de tal magnitud que la embarcación parecía naufragar y Dios continuó tratando con Jonás, permitiendo que los marineros lo arrojaran al mar. Luego, Él mismo preparó un enorme pez en cuyo vientre Jonás pasaría tres días y tres noches, para luego ser vomitado en Tarsis por mandato de Dios.
A cada uno de nosotros Dios nos ha llamado a hacer una misión, y muchas veces no la hacemos, sino que anteponemos excusas, y nos alejamos de su predencia tal como lo hizo Jonás. Pero su voluntad es para cumplirla, de lo contrario sufriremos las consecuencias de emprender otro camino.
Jonás perdió tiempo y dinero. La Palabra nos dice que: “pagando su pasaje… para irse… lejos de la presencia de Jehová”, y ese valor así como el tiempo transcurrido en el viaje se perdió. Cuando Hay pérdidas en nuestra vida, siempre hay frustración y angustia que son los resultados de no obedecer a Dios. Muchos hoy queremos que Dios encaje con nuestra forma de pensar y hacer, pero Él está por encima de nuestros pensamientos y propósitos. Es imprescindible obedecer sus mandatos.
Nuestra vida influye en quienes nos rodean. No podemos pensar que podemos hacer lo que queramos que y la vida seguirá normal, vemos que los marineros sufrieron la desobediencia de Jonás, por tanto, debemos pensar en nuestra familia, en nuestros hijos, en la iglesia y en hacer la voluntad del Señor.
Hermano, no podemos dormirnos en un lado del barco mientras este parece naufragar, el mundo está siendo zarandeado en un mar de maldad y pecado. Somos mensajeros del Dios Altísimo, comisionados para llevar el mensaje de salvación por la fe en Jesús.
4. Alaba a Dios
5. Comparte
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