Los cielos están abiertos
2016-02-01
1. Oración inicial
Señor, quiero escucharte decir: “amado, me complazco en ti”, que mis acciones te agraden, ayúdame a llevar una vida santa y consagrada a ti, a adorarte y a servirte todos los días de mi vida. Amén.
2. Lee la palabra de Dios
«Entonces Jesús vino de Galilea a Juan al Jordán, para ser bautizado por él. Mas Juan se le oponía, diciendo: Yo necesito ser bautizado por ti, ¿y tú vienes a mí? Pero Jesús le respondió: Deja ahora, porque así conviene que cumplamos toda justicia. Entonces le dejó. Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua; y he aquí los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre él.
Y hubo una voz de los cielos, que decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia».
3. Reflexiona
Muchas veces hemos pasado por estos versículos, y podemos preguntarnos que hizo que esa voz del cielo dijese:” Este es mi Hijo amado en quien tengo complacencia”, Jesús iba a comenzar su ministerio con la seguridad de que Dios se complacía en Él. Cuando el Espíritu Santo descendió sobre Jesús nos muestra que estaba dotado totalmente con el poder del Espíritu para iniciar su ministerio en la tierra.
Pues como el día del bautismo de Jesús, debemos entender que los cielos están abiertos también para nosotros. Su Espíritu ya ha sido derramado desde el pentecostés para que todo creyente reciba el poder para hacer la obra de Dios en esta tierra. Jesús no necesitaba del bautismo de arrepentimiento, pues era sin pecado, pero lo hace para testimonio de todos los que allí estaban. Quería cumplir con lo ordenado y de esta manera se comprometía a ponerse bajo la justicia de la Ley y así simbólicamente se proponía a cumplirla toda.
Dios quiere complacerse también con nosotros, y el primer paso es arrepentirnos de nuestro pecado y llenarnos del fruto de su Espíritu: Amor, gozo, paz paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre y templanza. Dios se complace en nosotros cuando llevamos una vida santa, cuando dependemos totalmente de su gracia y cuando damos el primer paso para obedecer y servir en su Nombre.
4. Alaba a Dios
5. Comparte
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