La oración que agrada a Dios. Parte 1
2018-04-06
1. Oración inicial
Padre, hoy me rindo a ti, reconozco cuán grande eres y cuánto necesito de ti, más que mi propia vida, gracias por todo lo que has hecho por mi, y porque me salvaste de la muerte por medio de tu hijo Jesús. Amén.
2. Lee la palabra de Dios
«Vosotros, pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra. El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy. Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores. Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal; porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, por todos los siglos. Amén.», Mateo 6:9-13
3. Reflexiona
La oración es el privilegio de acercarnos al trono del Rey de nuestra vida y entregarle todos nuestros anhelos, afanes, peticiones y sobre todo entrar en una relación íntima.
Si llegáramos a un palacio de un rey terrenal, seguramente no iniciaríamos pidiéndole cosas sin antes saludarlo y mostrarle respeto. Cuánto más con aquel que merece todo nuestro amor, pues no solo nos dio la vida sino que sustenta nuestra existencia. Por lo tanto el primer paso para acercarnos a Dios por medio de la oración es reconocer a quién nos estamos dirigiendo. Él merece toda nuestra honra, pues nos dio a su hijo en sacrificio para liberarnos del pecado y la muerte eterna.
Este es el principio de reconocer quién es Él y lo que ha hecho por nosotros y el significado de “…Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre…”, Mateo 6:9b
Hoy inicia tu oración personal, reconociendo al Dios todo poderoso, todo lo que ha hecho por ti y cuán grande, poderoso y maravilloso es. El primer paso para acercarnos a Dios, es reconocer lo inmenso que es Él, dejando de lado mi orgullo y mi auto-enaltecimiento propio (verdadera humildad).
4. Alaba a Dios
5. Comparte
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