¿La fe sin obras, las obras sin fe? Parte 2

«Amado Jesús tú has dado tu vida por mi y quiero ser hallado en ti no teniendo mi propia justicia sino tu justicia que me ha sido imputada para ser justificado y limpiado de todo pecado, he sido perdonado para ahora vivir agradando al Padre en todo y haciendo su voluntad guiado por el Espíritu Santo que ahora mora en mi. Amén.»

«Entonces le dijeron: ¿Qué debemos hacer para poner en práctica las obras de Dios? Respondió Jesús y les dijo: Esta es la obra de Dios, que creáis en el que él ha enviado.», Juan 6:28-29

“Porque esta es la voluntad de Dios: que haciendo bien, hagáis callar la ignorancia de los hombres insensatos; como libres, pero no como los que tienen la libertad como pretexto para hacer lo malo, sino como siervos de Dios.”, 1 Pedro 2:15-16

Tendremos galardones y recompensas que el Señor tiene para nosotros cuando ejecutamos las obras que él nos ha encomendado, pero la salvación de nuestra alma es solo por la fe como lo explica de manera concluyente el versículo de hoy en Juan 6:28-29 y también explícitamente Romanos 3:22-24 que enfatiza que todos hemos pecado y la salvación es por gracia por medio de la fe en Cristo: “la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo, para todos los que creen en él. Porque no hay diferencia, por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús,”

Entonces, ¿dónde se armonizan las obras y la fe? pues que Dios por su gracia derramó su amor en nuestro corazón: “la esperanza no avergüenza; porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado” (Romanos 5:5) y esto significa que somos transformados de dentro hacia afuera por ese amor de Dios.

La fe que obra por el amor, es el eslabón que armoniza las obras y la fe, para que podamos tener una fe con obras y hacer las obras con fe, esto es, de acuerdo a su voluntad y no por impulsos emocionales o religiosos, como lo explica Galatas 5:6 en el contexto de los religiosos que pretenden ser justificados por las obras que exige la ley, a lo cual Pablo les dice por el Espíritu: “porque en Cristo Jesús ni la circuncisión vale algo, ni la incircuncisión, sino la fe que obra por el amor.” (Gálatas 5:6)

Lo que hablamos y finalmente lo que hacemos reflejará el carácter de Cristo porque nadie puede dar de lo que no tiene, o como lo explica el Señor Jesús: “El hombre bueno, del buen tesoro de su corazón saca lo bueno; y el hombre malo, del mal tesoro de su corazón saca lo malo; porque de la abundancia del corazón habla la boca.” (Lucas 6:45).

Hermanos, es hora de sacar del buen tesoro de nuestro corazón y no vivir ya como vivíamos antes, pues somos nuevas criaturas, creadas en Cristo Jesús para que andemos en las buenas obras que Dios preparó de antemano (Efesios 2:10).