La culpa por el pecado también fue quitada por Cristo. Parte 1
2017-10-09
1. Oración inicial
Gracias Señor por perdonar mis pecados y librarme de toda mi maldad, gracias porque también llevaste mi culpa en la cruz y puedo vivir complemente en paz. Amén.
2. Lee la palabra de Dios
“Mientras callé, se envejecieron mis huesos en mi gemir todo el día. Porque de día y de noche se agravó sobre mí tu mano; se volvió mi verdor en sequedades de verano. Mi pecado te declaré, y no encubrí mi iniquidad. Dije: confesaré mis transgresiones a Jehová; y tú perdonaste la maldad de mi pecado…” (Salmo 32: 3-5)
3. Reflexiona
Si queremos ser libres del pecado y de la culpa que este conlleva debemos hacer lo que dice la Palabra de Dios:
Primero, confesarle al Señor, en este Salmo dice «Confesaré mis transgresiones al Señor», en Proverbios 28:13 enseña que «El que encubre sus pecados no prosperará, mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia», al hombre podemos engañar pero a Dios no, por tanto, debemos ir en oración íntima y confesarle nuestra culpa; no necesitamos intermediarios para eso, ya que el único intermediario según la Biblia es Cristo (1 Timoteo 2:5). Sólo por medio de Él , Dios perdona nuestras iniquidades.
Segundo, aceptemos su perdón apartándonos del mal y no vivamos en la culpa, en 1 Juan 1:9 dice “Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.” y luego dice en 1 Juan 2 «…estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo.” Si nuestro abogado es Cristo, el cual nos libera del pecado por medio de la fe en Él, ¿Por qué vivir en el temor y la culpa?
La mayoría de nosotros hoy en día no nos perdonamos a nosotros mismos, recibiendo el perdón de Dios dado en la cruz, viviendo en la culpa, siendo esclavos de la mentira del pecado.
En conclusión, confesemos nuestros pecados a Dios, en intimidad, con verdadero arrepentimiento y aceptemos el perdón ofrecido mediante la fe en Jesucristo y no vivamos como condenados si hemos sido liberados. Esto traerá gran bendición a nuestra vida y una verdadera transformación, pues al ser limpios en nuestra conciencia, por la palabra, prosperaremos en todo.
4. Alaba a Dios
5. Comparte
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