Jesús venció a nuestros enemigos
2017-08-01
1. Oración inicial
Señor, mi Dios protector, guerrero poderoso, que vas delante de mi, hoy te alabo y te bendigo, me has dado la victoria, por medio de la cruz. Amén.
2. Lee la palabra de Dios
«Ninguna arma forjada contra ti prosperará, y condenarás toda lengua que se levante contra ti en juicio. Esta es la herencia de los siervos de Jehová, y su salvación de mí vendrá, dijo Jehová.»
”Y habido consejo con el pueblo, puso a algunos que cantasen y alabasen a Jehová, vestidos de ornamentos sagrados, mientras salía la gente armada, y que dijesen: Glorificad a Jehová, porque su misericordia es para siempre. Y cuando comenzaron a entonar cantos de alabanza, Jehová puso contra los hijos de Amón, de Moab y del monte de Seir, las emboscadas de ellos mismos que venían contra Judá, y se mataron los unos a los otros.”
Isaías 54:17, 2 Crónicas 20:21-22.
3. Reflexiona
Las armas de Dios son espirituales y poderosas, Él va delante de nosotros cuando estamos en guerra. ¿Pero cuál es nuestra guerra? ¿Cuál es nuestro enemigo? La Biblia enseña en Efesios 6, acerca de enemigos espirituales, potestades, principados y demonios, seres de tinieblas dirigidos por Satanás que quieren matar, robar y destruir nuestras vidas. Pero la buena noticia es que Jesús los venció en la cruz y los despojó (Colosenses 2:15), triunfando sobre ellos y quitando la opresión que antes ejercían sobre nosotros. Somos ahora más que vencedores por medio de Jesús y por esto reafirmados en Él, vemos cómo nuestros enemigos huyen en desbandada, confundidos y terminan destruyéndose entre ellos. Alabemos a Dios, cuando miremos los ataques y dificultades que causan los adversarios de la mente y el corazón, confiados en Jesús, miremos como entre ellos mismos se destruyen.
4. Alaba a Dios
5. Comparte
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