Este es el tiempo, es ahora

Amado Dios, gracias por salvarme, por sacarme de las tinieblas a tu luz admirable, por darme tu gracia para restaurar esta tierra. Hoy es el tiempo para liberar a los presos por el pecado, para mostrar tu luz a los que están en tinieblas y mostrarles tu salvación. Este es el tiempo aceptable para el cumplimiento de la Gran Comisión. Amén.

“Así, pues, nosotros, como colaboradores suyos, os exhortamos también a que no recibáis en vano la gracia de Dios. Porque dice: En tiempo aceptable te he oído, Y en día de salvación te he socorrido. He aquí ahora el tiempo aceptable; he aquí ahora el día de salvación”2 Corintios 6:1-2

“Así dijo Jehová: En tiempo aceptable te oí, y en el día de salvación te ayudé; y te guardaré, y te daré por pacto al pueblo, para que restaures la tierra, para que heredes asoladas heredades; para que digas a los presos: Salid; y a los que están en tinieblas: Mostraos. En los caminos serán apacentados, y en todas las alturas tendrán sus pastos. No tendrán hambre ni sed, ni el calor ni el sol los afligirá; porque el que tiene de ellos misericordia los guiará, y los conducirá a manantiales de aguas”. Isaías 49:8-10

El tiempo favorable es ahora, tiempo profetizado por Isaías, tiempo de la gracia, tiempo del cumplimiento que llegó con la venida de Cristo y su obra redentora, donde Dios ofrece al mundo la salvación. Por eso es importante para los que amamos y servimos al Señor permanecer firmes, es el tiempo de actuar decisivamente en el cumplimiento de la Gran Comisión.

Ahora más que nunca el apóstol Pablo nos exhorta como a los corintios, a no recibir la gracia de Dios en vano, a orar por la salvación del mundo y a no dejar que la respuesta al evangelio sea arruinada por aquellos que no actúan con integridad como siervos de Dios. No importa los altibajos de la vida cristiana, siempre debemos actuar con la verdad y no convertirnos en piedras de tropiezo para los que desean convertirse.

Los creyentes de Corinto se habían dejado confundir por maestros que enseñaban una doctrina diferente y empezaron a dudar del mensaje con el que Pablo les había instruido, el mensaje de la salvación en Cristo, del arrepentimiento y de la necesidad de reconciliación con el Padre Celestial. Podemos estar cayendo en el mismo error, cuando no estudiamos la Palabra de Dios, cuando no crecemos en el conocimiento de nuestro Señor y Salvador. Podemos estar predicando que vendrán tiempos mejores, con falsas expectativas que hace que muchos atrasen su decisión por Cristo. Esto puede hacer que pierdan la oportunidad de recibir el perdón de Dios.

El tiempo es ahora y es el tiempo favorable para compartir de Cristo, su segunda venida está cerca, como dice Romanos 13:11 “Y esto, conociendo el tiempo, que es ya hora de levantarnos del sueño; porque ahora está más cerca de nosotros nuestra salvación que cuando creímos”.

Esta profecía de Isaías también manifiesta el consuelo de Dios hacia aquellos que se acogen a la gracia de Dios por medio de Jesús, que lo aceptan en su corazón como Señor y Salvador, ofreciéndoles una vida de abundante paz, perdón, sanidad y provisión.

Aunque hay dificultades en el camino al cielo, la gracia de Dios nos llevará por encima de ellas. El Señor es nuestro Pastor y nos conducirá por el camino eterno. Hoy nos invita a confiar en sus promesas, a alentarnos con su Palabra, a experimentar la llenura de su Espíritu, a recibir su gracia y poder para conducir a otros a la vida eterna.