Dios pide sinceridad
2018-01-28
1. Oración inicial
Señor dame un corazón sincero para amarte y adorarte. Que mis labios expresen el gran amor que siento por ti y mis acciones sean el reflejo de una fe verdadera que me lleva a la obediencia a tus mandatos. Amén.
2. Lee la palabra de Dios
“Dice, pues, el Señor: Porque este pueblo se acerca a mí con su boca, y con sus labios me honra, pero su corazón está lejos de mí, y su temor de mí no es más que un mandamiento de hombres que les ha sido enseñado”. Isaías 29:13
3. Reflexiona
¿Qué tan sincera es nuestra relación con Dios? Recordemos que Dios no mira lo que mira el hombre, que sólo ve lo externo, Él mira lo profundo del corazón. Nuestra fe puede ser aparente y carente de toda verdad. Nos acercamos a Dios solo por tradición, por cumplir mandamientos de hombres. Cuando nuestra vida espiritual es así, la falta de fe nos impiden tener la visión correcta del Señor.
David era un hombre sincero conforme al corazón de Dios, porque su relación era genuina, reconocía su pecado y no ocultaba su necesidad de Dios. Le pedía constantemente a Dios que le enseñara a ser su voluntad y no la suya. Quería depender absolutamente de Dios para no caer en más errores. La sinceridad de David es una cualidad que debemos anhelar para llegar a ser gratos delante de Dios.
Siempre nos dejamos llevar por lo que creemos que es mejor para nosotros y no le permitimos a Dios participar de toda nuestra vida, lo que nos impide obedecer la voluntad divina. La ceguera espiritual viene cuando nuestra relación con Dios se petrifica y se vuelve una religión basada en ritos externos y fórmulas litúrgicas repetidas de memoria.
Cuando volvemos el culto a Dios algo mecánico dejamos de buscar a Dios con un corazón sincero, Jesús lo llamó “farisaísmo”. A veces decimos que somos de Dios, y nos llamamos “cristianos”, pero todo lo que decimos y hacemos muestran que no somos obedientes a la Palabra de Dios. Siendo hipócritas con una vida espiritual rutinaria y aburrida, en vez de tener una relación real con el Señor fundamentada en el amor a Él y a los demás. Profesamos ser sabios y somos unos necios.
Llenémonos de sinceridad para con Dios y para con los demás.
4. Alaba a Dios
5. Comparte
Puedes compartir este devocional en Facebook, Whatsapp, Twitter y LinkedIn