A los pies del Señor
2016-03-12
1. Oración inicial
Amado Jesús quiero entrar a tu presencia y permanecer en silencio, a tus pies. Escuchar la voz de tu Espíritu, y dejar mis problemas en tus manos. Quiero valorar el tiempo que te dedico, como la buena parte que nunca me será quitada. Amén.
2. Lee la palabra de Dios
“Aconteció que yendo de camino, entró en una aldea; y una mujer llamada Marta le recibió en su casa. Esta tenía una hermana que se llamaba María, la cual, sentándose a los pies de Jesús, oía su palabra. Pero Marta se preocupaba con muchos quehaceres, y acercándose, dijo: Señor, ¿no te da cuidado que mi hermana me deje servir sola? Dile, pues, que me ayude. Respondiendo Jesús, le dijo: Marta, Marta, afanada y turbada estás con muchas cosas. Pero sólo una cosa es necesaria; y María ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada”.
3. Reflexiona
Así como Marta, invitó al Señor a su casa, cada uno de nosotros lo hemos invitado a nuestra vida. El propósito del Señor es tener una relación permanente de amor con cada uno. Pero no todos lo entendemos así. Aunque Marta recibió a Jesús, es su hermana María, la que humildemente se sienta a sus pies y escucha la Palabra de Dios. Esto quiere decir que muchos cristianos están más preocupados por servir al Señor que por cultivar una relación personal con Él. Estas son las personas que son activas, pero su vida de oración y Palabra de Dios, es muy pobre.
Dios quiere que aprendamos primero a escucharle atentamente, a relacionarnos íntimamente con Él. Y llama a esto LA MEJOR PARTE. El Señor dice en su Palabra que busquemos primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas las demás cosas nos serán añadidas. Que felices seríamos si entendiéramos que nuestra prioridad siempre debe ser el Señor, entonces Él se encargaría de todas nuestras cosas y organizaría nuestra vida. Entonces, no estaríamos afanados, ni turbados por las situaciones que enfrentamos diariamente.
La BUENA PARTE, es escuchar al Señor cada día y nuestro corazón sería confortado, apaciguado, consolado y descansado de tantas cosas. Cuando uno valora esto, nunca le será quitado. Recordemos que cuando hay desasosiego y tensión en la vida, es porque no hemos sacado el tiempo suficiente para estar diariamente a los pies del Señor y estamos llevando solos nuestros problemas.
4. Alaba a Dios
5. Comparte
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