Quietud y confianza

Cuánto desfallecemos, cuando no vemos tu poder y tu gloria; Señor perdónanos por no entender que nuestra vida depende de ti y que sólo en tus manos está nuestra salvación. Ahora Señor, queremos descansar en tu presencia, esperando la respuesta en tu tiempo. Bendito seas Tú, oh Jehová Dios, Nuestro Padre.

«Porque así dijo Jehová el Señor, el Santo de Israel: En descanso y en reposo seréis salvos; en quietud y en confianza será vuestra fortaleza.», Isaías 30:15

«Bueno es Jehová a los que en él esperan, al alma que le busca. Bueno es esperar en silencio la salvación de Jehová.», Lamentaciones 3:25-26

Muchas veces nos encontramos abatidos a causa de las aflicciones; no vemos la salida y entonces nos angustiamos y viene la desesperanza. Somos mediáticos y queremos soluciones inmediatas, nos olvidamos que es en el tiempo de Dios la salvación y las respuestas a nuestros problemas.

A quienes le buscamos y esperamos en Él, tengamos la seguridad de la liberación por su misericordia. Esperemos porque Él acudirá en nuestra ayuda. No desmayemos porque Él nos oye.
Esperar es quizá lo más difícil cuando le clamamos a Dios. En el hebreo es «gavah», significa: aguardar, buscar, expectativa, esperanza. Este verbo aparece unas 50 veces. «Qavah» es la raíz del sustantivo «tiqvah» que quiere decir: «esperanza» o «expectativa». Qavah expresa la idea de «aguardar lleno de esperanza».
Isaías 25:9 dice: «Y se dirá en aquel día: He aquí, éste es nuestro Dios, le hemos esperado, y nos salvará; éste es Jehová a quien hemos esperado, nos gozaremos y nos alegraremos en su salvación». Debemos esperar con alegría, con acción de gracias y alabanza, porque sabemos que Él nos dará lo mejor en el momento preciso. Esto debe llevarnos a ser pacientes y a mantenernos tranquilos y obedientes , sabiendo que Dios cumplirá.