El secreto de Dios. Parte 1

Padre, en lo secreto me enseñas sabiduría, me hago mas sabio para entender y ejecutar tu voluntad en el diario vivir, pues me haces mas sensible a tu voz, gracias por que a través de la oración en intimidad contigo, puedo entender tu palabra

«Porque ¿quién estuvo en el secreto de Jehová, y vio, y oyó su palabra? ¿Quién estuvo atento a su palabra, y la oyó?», Jeremías 23:18
«¿Oíste tú el secreto de Dios, Y está limitada a ti la sabiduría?», Job 15:8

Nuestro Señor Jesucristo nos dice «Mas tú, cuando ores, entra en tu aposento, y cerrada la puerta, ora a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público» Mateo 6:6, es decir que todo lo que hacemos en el día, es una consecuencia directa de nuestra intimidad en secreto con Dios, es decir de la oración.
Pero todas las religiones aparentemente oran a un ser superior, o al dios que han inventado; sin embargo la oración del cristiano es diferente, es una oración de acuerdo a su palabra escrita en la Biblia y guiada por el Espíritu Santo que habita en su corazón por fe, el cual acomoda nuestro pensamiento al pensamiento de Dios (1 Corintios 2:13).
Solo mediante el secreto de Dios, podemos conocer el consejo de Dios, su designios para nuestra vida, solo el sabe lo que es necesario en nuestras vida, solo el conoce profundamente lo que nos conviene en cada situación y decisión. Si al colocarnos en su presencia íntima, entendemos su consejo, el cual esta escrito en su palabra, este debe ser nuestro anhelo diario, primero entrar en su presencia para entender su consejo, el cual esta escrito, y además el nos llena de fortaleza para ponerlo por obra a pesar de la dificultades. Así mismo lo hacía en Señor Jesús cuando habitó entre nosotros, lo primero en el día era buscar en secreto, la guía de su Padre. Sigamos el ejemplo de nuestro señor Jesús, temprano en la mañana buscaba en secreto, la guía del Padre, para ver y entender su voluntad como escrito está en Marcos 1:35. Salmo 5:3, Job 8:5-7.