El don infable
2016-03-09
1. Oración inicial
Gracias Jesús, por ser el mayor de los dones, ese don inefable que trae salvación y justificación al mundo, conocerte es la esencia de toda verdadera bendición. Amén.
2. Lee la palabra de Dios
“¡Gracias a Dios por su don inefable!”
“El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?”
3. Reflexiona
Para poder apreciar y apropiarnos de los dones menores de Dios, debemos poseer el mayor de sus dones: Jesucristo. Es el gran regalo de Dios al mundo. Es el don inefable, porque no se puede expresar, ni explicar, ni describir en palabras. Desde su nacimiento hasta su ascensión es maravillosamente glorioso. Dios hecho hombre viviendo entre nosotros. Por el cual Pablo exclamo: ¡Gracias a Dios por su don inefable¡
Es el don inefable de la vida, porque es el único que puede crear y dar vida. Jesús es la muestra más maravillosa del amor de Dios. Es su don inefable por su propósito, darlo todo sin esperar nada, se dio sin egoísmo, se dio sin buscar agradar a otros y sacar provecho, dio su vida por la humanidad y fue su máxima demostración de amor.
No es como nosotros que siempre esperamos retribución cuando damos algo. Somos egoístas y nos cuesta desprendernos de lo que tenemos.
Y dice: ¿No nos dará también con él todas las cosas? Todos los demás dones son de valor inconmensurablemente inferior a este Don de los dones, y en Él están virtualmente incluidos. El don de su Hijo incluye todos los dones inferiores, Dios se complace en dar dones o regalos a sus hijos para que sean usados para glorificarle y exaltarle. Para que le sirvamos y demos a otras personas nuevas de gran gozo y sus vidas tengan propósito y felicidad.
Debemos proponernos imitar el ejemplo de Cristo, sin cansarnos de hacer el bien, recordando que es más bienaventurado dar que recibir. Que nuestros labios se llenen de gratitud por el don inefable de la gracia que nos capacita para poder dar a los demás. Que podamos decir: ¡Gracias a Dios por Jesucristo¡ ¿Puedes decir tú lo mismo?
4. Alaba a Dios
5. Comparte
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