Dios aún invita

Amado Dios, te alabo y te glorifico porque has revelado a mi corazón que tu Palabra contiene el más puro y bendito amor porque has entregado tus mandamientos y leyes no para prohibirme y restringirme sino para protegerme y proveerme. Gracias Padre. Amen.

“Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro”.
“Más vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable”

Muchas personas ven en la Biblia sólo restricciones y prohibiciones. Otros ven en la Biblia sólo leyes y mandamientos. Pero Dios nos extiende en la Biblia, miles de invitaciones para proveernos y protegernos.
Nos invita a entrar a la sala del trono de la gracia en oración para alcanzar misericordia. Nos invita a formar parte de su familia, de su linaje, de su nación santa para que llevemos las nuevas de salvación. Nos invita a ser socios en su programa de redención, siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús.
Descubramos y respondamos a las numerosas y grandes invitaciones que Dios sigue ofreciendo en su Palabra.